Proceso Hidrotérmico de la Soja

Es indispensable seleccionar la mejor combinación entre una temperatura óptima y tiempo. La calidad de la leche de soja varía de un método de procesamiento a otro.

Proceso Hidrotérmico de la Soja

Existen tres puntos importantes a tener en cuenta al momento de definir el mejor proceso a utilizar en la elaboración de leche de soya, a fin de producir un producto final de buena calidad: la eliminación del sabor afrijolado, la digestibilidad y el porcentaje de proteínas obtenido. 
LAS MAQUINAS ELEGIDAS DETERMINAN QUE PROCESO SE UTILIZARA EN ELABORAR LA LECHE, Y ESTE PROCESO DETERMINA LA CALIDAD DEL PRODUCTO OBTENIDO.

Para tener éxito en esto, es importante comprender primeramente el funcionamiento del sistema biológico que opera dentro de esta leguminosa, para así entender los procesos mecánicos y la maquinaria necesaria aplicada en su transformación, con el fin de obtener alimentos: nutritivos, agradables al paladar y de producción redituable.

El PROCESO HIDROTERMICO DE MOLIENDA Y COCCION SIMULTANEA que aplicamos con nuestras máquinas procesadoras, sirve para: 
• MEJORAR EL SABOR, 
• AUMENTAR EL VALOR NUTRITIVO,
• INACTIVAR LOS SISTEMAS ENZIMATICOS NATURALES DE LA SOYA.

La calidad de la leche de soya varía de un método de procesamiento a otro. Cabe destacar que, si bien es imprescindible el tratamiento térmico en la elaboración de leche de soya, debe evitarse su aplicación excesiva, debido a que además favorecer al sabor y a la digestibilidad, reduce la solubilidad de la proteína y genera precipitación de la misma. 
Es indispensable seleccionar la combinación óptima de temperatura y tiempo. 
POR ESTO, ES FUNDAMENTAL EVALUAR EL PROCESO QUE REALIZA LA MAQUINARIA QUE ELIJA PARA SU PROYECTO.


Nuestro proceso propone aplicar la CANTIDAD JUSTA DE CALOR EN EL MOMENTO MAS ADECUADO para optimizar los resultados.

Con el proceso térmico de molienda y cocción simultánea logramos:

• Controlar la lipoxigenasa, causante del sabor afrijolado. 

• Desactivar los inhibidores de la tripsina para lograr la digestibilidad de la proteína.

• Controlar el calor aplicado para optimizar la solubilidad y porcentaje de proteínas.